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04 marzo 2009

Miedo (carveriana)


Miedo a que esta vida no sea más que la maqueta a escala de una vida próxima. Miedo de la electricidad, de los rayos y los truenos. Miedo de los que dicen “difícil y complicado”. Miedo a convertirme en el personaje de un relato de Carver. Miedo a ahogarme dentro de mi propia piel. Miedo a las llamadas que empiezan “¿A que no sabes quien soy?”. Miedo a que el tiempo se detenga y yo pase de largo. A que alguien me quiera sin ser correspondido. Miedo a no sentir nada al escuchar a Bob Dylan o Leonard Cohen. Miedo a que lo más profundo de mí esté en la superficie. A que un verso compense horas de sufrimiento. Miedo a contarle mi vida a desconocidos. Miedo a sentirme joven en el cuerpo de un anciano. Miedo a poner la otra mejilla. A los apagones en medio de la noche. A acabar durmiendo en el remolque de un coche. Miedo a las prórrogas y a las muertes súbitas. Miedo a convertirme en el mejor amigo de mi novia. Miedo a releer mis diarios de adolescente. Miedo a mis órganos internos. A la sangre que no brota. Miedo al borrador de mis poemas. Miedo a ciertos adjetivos. Miedo a las turbulencias en medio del Atlántico. Miedo a comprar más libros de los que podré leer nunca. Miedo a los estribillos que resumen como me siento. Miedo a que la mentira me haga más libre que la verdad. Miedo a la llave del gas.

Miedo al cielo de Madrid en agosto del 97 o a la luna de Londres, invierno del 93. Miedo a tener que elegir entre un cable rojo y otro azul. Miedo a los coches que se estrellan a lo lejos. Miedo a convertirnos en el horóscopo que estamos leyendo. Miedo a la leche cortada y los besos de despedida. Miedo a los ojos de un perro enterrado en la arena mientras sube la marea. Miedo a los ataúdes blancos. A los hospitales y las discotecas. Miedo a lo que está podrido dentro de mí. Miedo a que los demás puedan verme por dentro. Miedo a que se queden en lo que se ve por fuera. Miedo al insomnio y miedo al irme a dormir. Miedo a que Dios sea al mismo tiempo bueno y malo. Miedos de las avispas y miedo al folio en blanco. Miedo a ser un viejo de 36 años. Miedo a que mis hijos regalen todos mis libros cuando yo no esté. Miedo a que mis padres lloren, o a oírles hacer el amor en la habitación de al lado. A que el pasado y la memoria no sirvan para nada. Miedo a aparecer en los diarios de otro. Miedo a ser estéril y miedo a poder engendrar. Miedo a los tejados y las azoteas. Miedo a las flores artificiales que no lo parecen. Miedo a seguir teniendo miedo. Miedo a la muerte y miedo a ser capaz de matar. Miedo a ser yo. Miedo a que seas yo. Miedo a ser tú.

Artista del día: No Age

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